"Yo tengo contrato hasta 2014 y soy jugador del Santos. De eso no sé nada. Eso hay que preguntárselo a mi representante". Así contestó Neymar en plena celebración de la Recopa Sudamericana a una pregunta sobre su inmediato aterrizaje en el FC Barcelona.
Pese a su juventud, 20 años, el delantero brasileño tiene tablas para esquivar las cuestiones más molestas. Él sabe que acabará vestido de azulgrana y ya le ha llegado que no tendrá que esperar a 2014 para cumplir su sueño, conoce la intención del Barça de contratarle ya en el verano de 2013, al término de la presente temporada.
Sólo una lesión de larga duración, como la que sufrió la pasada temporada David Villa, podría acelerar el proceso y forzar su llegada en el mercado de invierno.
No sólo el Barça no quiere esperar un año más hasta 2014, el propio jugador considera que su ciclo en Santos ya va tocando a su fin, especialmente en un momento en el que su club ha vendido al Sao Paulo a uno de sus mejores amigos en el vestuario, Ganso. La coincidencia de intereses y la presunta intromisión de los petrodólares del PSG, negada por Leonardo, ayudará a ver a Neymar de azulgrana en 2013.